25 ago 2015

Mug Cake de Yogur con grosellas y Mug Cake de Nocilla (o Nutella)

Dos recetas y consejos para hacer Mug Cakes_ by Helen


Como seguimos en plena campaña "No con mi horno", aunque ha refrescado un poco en mi minúscula cocina encender el horno sigue siendo una tortura, esta semana proponemos dos recetas para hacer Mug Cakes.

Los Mug Cakes son unos bizcochitos que se hacen en una taza y en el microondas. Son rápidos y fáciles de hacer, resultones y te solucionan la vida cuando necesitas un postre (o un desayuno o una merienda) y no tienes tiempo para ponerte a hacer un bizcocho.
El resultado no está al mismo nivel de sabor y textura que el de un bizcocho horneado tradicionalmente pero eso no quiere decir que no estén buenos.




Ante todo aclarar que no soy ninguna experta. Estos son casi los primeros que hago, llevo unos días probando recetas de un libro que me compré recientemente  Mug Cakes, Bizcochos en taza listos en 5 minutos de Webos Fritos y las recetas que ahora os propongo son las dos adaptaciones que he hecho que hasta el momento me han gustado mas.
Os recomiendo este libro pues explica muy bien la técnica, da útiles consejos y te da pistas de cual ha sido el problema con tu mug cake cuando no te ha salido bien (Podéis también consultar su web) .



Hay muchos otros libros y en internet se pueden encontrar infinidad de recetas. Para mi lo mejor de los Mug Cakes es que como la cantidad de ingredientes que necesitas es pequeña da mucho margen a la experimentación, a ir cambiando cositas aquí y allá hasta encontrar una receta que te satisfaga.

Después de haber hecho unos cuantos para mi estos serían los puntos más importantes a tener en cuenta:

  1. Respetar el tiempo de cocción que aparece en la receta la primera vez que lo hagas.  Comprobar la potencia que tiene el microondas, en estas dos recetas se hacen a 800 W, variando el tiempo si la de tu micro es diferente. Y no es sólo eso, aunque sea de la misma potencia, como con los hornos convencionales, cada microondas es un mundo por lo que seguramente requerirá alguna variación. Mi consejo es hacerlo la primera vez exactamente como dice la receta, aunque te parezca que no está hecho ten en cuenta que se sigue haciendo en la taza una vez sacado del microondas. Si ves que queda crudo la próxima vez aumentas el tiempo un  poco, unos 10 segundos, y vas probando de 10 s. en 10 s. hasta que quede a tu gusto (o vas reduciendo 10 s. si ves que te queda muy hecho).
  2. Tener en cuenta el tamaño de la taza. En cada receta indico para que tipo de taza es. Se pueden doblar o partir por la mitad las cantidades de ingredientes si se quieren utilizar tazas de diferentes tamaños. Esto de los mug cakes no es para nada una ciencia exacta así que el tema de las cantidades es un poco a ojo, como he dicho antes es cuestión de experimentar. Lo más fácil es hacer caso de la receta y utilizar una taza de tamaño similar.
  3. Girar la taza a media cocción y colocarla en el borde del plato giratorio. Esto es muy importante ya que de dejarla siempre en la misma posición se cocería más de un lado que de otro . Se ha de poner en el borde del plato con el asa hacia un lado y a mitad de cocción girarla con el asa hacia el otro lado. Si se deja en el centro del plato no se hará bien.
  4. No llenar demasiado la taza. lo ideal es dejar unos dos dedos desde el borde. En algunas recetas la masa crece muchísimo, aunque al sacarlos se desinfla bastante, por lo que si se llena demasiado la taza es fácil que desborde. Puede ser útil cubrir la parte superior de la taza con papel de horno sujetado con una goma, de esta manera la masa crece uniforme cuando desborda y no se tuerce ni se sale fuera.
  5. Consumir en poco tiempo. Hay quien los prefiere calientes o templados, a mi me gustan más ya fríos pero en todo caso se han de comer al momento. No los puedes dejar para comer al día siguiente ni siquiera para después de unas horas ya que se endurecen fácilmente y se vuelven correosos.
  6. Utilizar cucharillas medidoras para los ingredientes. Esto no es necesario, en las recetas las medidas aparecen en cucharadas y cucharaditas, pero después de hacer unos cuantos mug cakes a mi me parece que es lo más cómodo. Tanto por la forma como porque no hay dos cucharas que sean iguales y midan lo mismo (y no digamos lo difícil que es que cada vez pongas la misma cantidad en ellas ¡¡¡A ver quien mide bien 1/4 de cucharadita en una cucharilla de postre!!!) hacerlo con cucharas convencionales es un fastidio. Con el juego de cucharillas medidoras no hay problema , siempre medirás la misma cantidad 1 cucharada = 1 Tbsp y 1 cucharadita = 1 tsp. y hay medidas de 1/2 y 1/4... absolutamente ideal. Importante: para la harina, levadura y otros ingredientes con ese tipo de textura (con tendencia a apelmazarse) no poner la cucharilla en el paquete directamente sino con ayuda de otra cuchara poner el ingrediente en la cucharilla (se ha de medir la cantidad sin compactar el ingrediente)

No hay mucho mas que explicar, los únicos utensilios que necesitas son una taza, un bol pequeño, un tenedor o similar para mezclar ( yo me he hecho con unas minivarillas y son ideales) y las cucharas para medir.
En cuanto a los ingredientes básicos son los usuales que hay en cualquier cocina: Mantequilla, azúcar, leche, huevos, harina, levadura...
La mantequilla se puede sustituir por aceite de oliva suave 
(1 cucharada de mantequilla= 1/2 cucharada de aceite).
La leche puede ser también una leche vegetal.

Os dejo a continuación receta de Mug Cake de Nocilla y receta de Mug Cake de yogur con grosellas.


17 ago 2015

Mousse de Fruta de la pasión y Frambuesa

Mousse sin huevo by Eli









Este verano vamos de una ola de calor a otra, de hecho parece que estemos aún en la primera y siendo sinceras a nosotras no nos apetece mucho encender el horno en estas condiciones, así que esta semana os traemos otra receta fresquita y fácil de hacer!

Que no tengamos que usar el horno no significa que los postres que hagamos sean sosos o con menos gracia, ni mucho menos! Hay que ser un poco originales escogiendo sabores veraniegos y en la decoración.





Esta receta la aprendimos hace poco en un curso de Gadgets cuina, nos enseñaron a hacer mousse de yuzu y piña colada, para esta ocasión yo me he decantado por otros sabores, fruta de la pasión y frambuesa. 
En el curso se explicaban dos métodos para hacer mousse, uno usando huevos y otro usando un producto sustitutivo que se llama Promousse, es un espesante y estabilizante que da aspecto cremoso sin necesidad de usar huevos. 

Después de ver como había quedado la mousse con el segundo método me decidí a probar el Promousse, es una buena alternativa si no quieres usar huevos y además la mousse queda con una textura más consistente.
Nunca había hecho mousse antes y me parecía algo complicado, pero con esta receta es facilísimo y sale buenísima, es un postre ideal para el verano.
Lo que me ha resultado más complicado ha sido montar la nata, mira que lo he hecho montones de veces y nunca había tenido problemas, no sé porqué esta vez no había manera, se me cortó un par de veces, así que os aconsejo que la nata esté bien fría y también el bol y las varillas.

Dejaré el método tradicional con huevos para otra ocasión, quizá para una mousse de chocolate...quién sabe!!


A continuación os dejo la receta y las especificaciones de ingredientes.


6 ago 2015

Tés Helados infusionados en frío

Recetas y consejos para preparar Tés Helados infusionados en frío by Helen



Estamos en pleno agosto, el calor en Barcelona es insoportable y desde luego no apetece mucho encender el horno, así que esta semana nada mejor que publicar un post sobre tés helados.







Al menos 2/3 de Games of Cakes somos auténticas adictas al té, para muestra os dejo una foto del cajón de mi mesa en el trabajo ... prácticamente el cajón entero lleno de cajas de té de todos los tipos y sabores. Está claro que si alguien tiene un antojo de té en la oficina sabe donde acudir.



Para hacer té helado hay varios métodos, el más corriente es infusionar el té en caliente como es habitual y después dejar enfriar y añadir hielo.

Pero para hacer té helado existe otro método que a mi me parece ideal. Se trata de infusionarlo en frío. Consiste en introducir el té (en bolsitas o suelto) en agua fría o a temperatura ambiente y dejarlo reposar en la nevera durante entre 6 y 10 horas.
Para un litro de agua unas 4 o 5 bolsitas y en cucharadas pues las que pondríais para unas 4 o 5 tazas.
Este método es perfecto para conseguir sabores diferentes pues se pueden poner frutas, menta, canela o lo que se te ocurra para que se infusionen junto con el té.
Se puede preparar por la noche y lo tendrás listo por la mañana o prepararlo por la mañana y estará en su punto para tomar por la tarde/noche.


Té verde infusionado con Lima y Fresas

Una vez transcurridas las 6-10 h. se filtra el té y se pone en una botella, jarra o recipiente con tapa que se pueda cerrar bien. en la nevera se conservará un par de días.



Rooibos infusionado con melocotón


Lo único que hay que tener en cuenta es que al infusionar en frío no se puede usar azúcar para endulzar, no se desharía. Yo utilizo edulcorante líquido.
También se puede usar sirope de azúcar. Este se puede preparar mezclando partes iguales de azúcar y agua, se lleva a ebullición y se remueve hasta que se disuelva todo el azúcar.
Una vez frío y en un recipiente hermético se puede conservar en la nevera durante meses.
Yo no lo he probado, me gusta el té poco azucarado y con unas gotitas de edulcorante me basta. En breve pruebo lo del sirope para saber si funciona bien y se disuelve sin problema.

Sólo faltará servirlo con mucho hielo y decorar el vaso con un poco de gracia.






Las combinaciones son infinitas. Mis preferidos para hacer té helado son el té verde y el té negro pero últimamente he estado experimentando con infusión de rooibos y té rojo y no están nada mal.
Os dejo unas cuantas ideas a continuación :
  • Té verde con limón y menta
  • Rooibos con naranja y canela
  • Té verde con lima y fresas
  • Te negro con limón
  • Te rojo con frutos del bosque
  • Rooibos con melocotón